Hay planes que huelen a verano y saben a mar. Uno de ellos, sin duda, es disfrutar de una parrillada de pescado frente al Mediterráneo, con el sonido de las olas de fondo y la brisa acariciando la piel. En la playa de Cantarriján, dentro del Paraje Natural de Maro-Cerro Gordo, se encuentra un rincón que combina ese placer con la mejor cocina marinera: Restaurante La Barraca. Aquí, la experiencia gastronómica se vive a pie de playa, sin prisas, rodeados de naturaleza y con la promesa de un almuerzo o una cena inolvidable. Y lo mejor de todo es que no tienes que esperar a que llegue el verano para disfrutar de este manjar, porque en nuestro chiringuito en La Herradura estamos abiertos todo el año.
El sabor del mar a la brasa
En La Barraca, el fuego y el mar se fusionan cada día en nuestras parrilladas de pescado, cambiándose con una materia prima de primera calidad, compuesta de pescado fresco, mariscos recién traídos de la lonja y una elaboración sencilla, fiel a la tradición de la cocina mediterránea.
En este sentido, la parrillada de pescado reúne distintas especies, desde pescados como las sardinas o el rape, hasta calamares, gambas o langostinos, preparadas con mimo sobre brasas que potencian su sabor natural.
El resultado es un festival de aromas y texturas que despierta todos los sentidos. El dorado del pescado a la brasa, el olor y sabor del humo y la jugosidad de cada bocado hacen que el Mediterráneo se sienta en cada plato.
El arte de cocinar el mar
Aunque la parrillada de pescado en la playa es una de las joyas de la casa, en La Barraca hay mil formas de disfrutar del mar. Si te apetece algo ligero, puedes probar unas sardinas recién asadas o unos boquerones al punto de sal. Si prefieres sabores más intensos, la rosada a la plancha o el calamar nacional son opciones irresistibles.
Para los que disfrutan compartiendo, la fritura variada combina diferentes tipos de pescado con un rebozado fino y crujiente, ideal para acompañar con un vino blanco bien frío. También puedes dejarte sorprender por las especialidades de la casa: la brocheta de rape y langostinos, el pescado al horno con verduras de la huerta, o el pulpo a la brasa, tierno y con un punto ahumado perfecto.
Los amantes del marisco encontrarán un auténtico paraíso degustando nuestras gambas rojas, quisquilla de Motril, navajas, almejas de carril o mejillones al vapor, entre otros. Todos elaborados con la sencillez que solo necesita el producto excelente.
Una experiencia completa junto al mar
Lo que diferencia a La Barraca no es solo su cocina, sino el entorno. Cuya terraza, literalmente sobre la arena, este restaurante en la playa de Cantarriján ofrece un ambiente relajado, distinguido y cuidado al detalle. Además, desde su terraza se puede disfrutar de una vista única del mar y de los acantilados, un escenario perfecto tanto para comidas familiares como para cenas románticas.
Y para completar la experiencia, el servicio es cercano y amable, pensado para que cada visita sea una experiencia de desconexión. Aquí el tiempo parece detenerse, y cada comida se convierte en uno de esos recuerdos que siempre se acompaña de una sonrisa.
Cómo disfrutar de la experiencia
Si quieres probar la auténtica cocina mediterráena y el sabor del mar, te recomendamos reservar con antelación, especialmente durante los meses de verano.
Puedes hacerlo fácilmente a través de la web oficial de Restaurante La Barraca, donde también podrás consultar nuestra carta completa y elegir tus platos favoritos.
Llegar es muy sencillo. Nos encontrarás en Playa de Cantarriján, Almuñécar, dentro de un entorno natural protegido, ideal para pasar el día entre baño, sol y buena comida.
Conclusión, el placer de comer junto al mar
La playa, el fuego y el sabor del Mediterráneo se dan la mano en La Barraca. Si buscas un lugar donde comer una parrillada de pescado en la playa, marisco fresco y una amplia carta de platos mediterráneos frente al mar, este rincón de Cantarriján es la elección perfecta para ti.
Ven, siéntate frente al mar y disfruta con los siete sentidos.
